martes, 24 de julio de 2012

HAIKUS





Césped de clavos 
en tierra sin cultivar, 
hacinamiento. 

II 

Árboles altos, 
bancos fijos al suelo 
no tienen raíz. 

III 

Sombra del barco 
agua naranja y clara 
gris horizonte. 

IV 

Sillas de metal, 
espuma de tres cafés, 
asientos libres. 



Líneas de chopos, 
barras rectas del puente, 
agua sin manchas. 

VI 

Blandos y duros, 
los caracoles quietos, 
piedras salientes. 

Jorge




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martes, 17 de julio de 2012

ISABEL GARCÍA MELLADO


de dedos temblando
mechero enciende cigarro,
temblando la boca lo mece
y un mechón de pelo sobre el ojo derecho,
temblando pulsa las teclas y acerca el teléfono a su oreja
se detienen los sonidos de la ciudad
se detiene el frío,
hasta temblar se detiene
y el mechón oscila sobre el ojo
le ha dicho cosas como “mis manos están pa tu piel”
pero ahora sólo tiemblan
las manos, las teclas, la línea telefónica,
el mechón, la mirada, la lumbre, el cigarro
y el cielo está a punto de quebrarse,
las estrellas se caen de golpe
cubren la ciudad de montículos brillantes
ella temblando como la noche
un mechón en su ojo derecho,
una cara que ya no es la suya
el pecho condecorado de punzones como un aceriquetero gigante
agarra un edding y le pide a alguien que se ha salvado del alud de astros
y al que no le traicione el pulso como a ella
que por favor le pinte una sonrisa

Cómo liberar tigres blancos, de ISABEL GARCÍA MELLADO
Editorial ya lo dijo casimiro parker 
ISBN 978-84-614-3611-8
Septiembre 2010

lunes, 16 de julio de 2012


Ondas aladas es un espacio para la difusión de la poesía más auténtica, aquella que versa sobre los sentimientos humanos.
Les invito a colaborar conmigo si escriben poesía. Mi mail es: eneas002@hotmail.com


AL OTRO LADO
Filamentos de una valla,
para poder llegar al descansillo
del enjambre moderno que se anhela,
un billete de vuelta
hacia un pasado indígena,
una nube de angustia con parche en el bolsillo,
una carta de ajuste
de un horizonte soñado,
un carácter que vive  en los portales en ayunas,
una dignidad con fondo vitalicio
y los cimientos aplastados
del mar de una patera.
Mención a un continente azucarado,
la tarta de aquel magma primitivo,
del linaje que habita en saco roto,
para empezar el lance en otra tierra.