martes, 30 de abril de 2013

DESAPARECIDA EN VARADERO



Solo anhelo un remanso de espirales,
un horizonte que empuje olas idénticas.

Pero la irregularidad del mar me corta,
me atenazan sus canales tan corrientes.

Bajo las piedras bañadas por la espuma
nadé tras la esperanza escondida por Pandora,
quise hallar en las algas el mandato de las ninfas,
y solo sé de hojas que me cubren el ombligo
frente a la furia del cosmos que me embiste.

Por eso nos bebemos el afecto
de copas que tan solo encierran brisas,
adoramos la piel cristalizada por el
ciclo  que nos dobla la espalda, que nos
obliga siempre a naufragar en el puerto,
para escapar de anémonas hacia el
lecho de rizos de este mar sin medida.

Si os gusta este poema y lo queréis votar, podéis entrar en esta red de poetas, muy recomendable de por sí:

sábado, 27 de abril de 2013

DESENCUENTROS




Somos un armazón
de proyectos que bajan
el toldo cada noche,
de palabras sin fecha,
de  aleteos de  párpados que
 se defienden
de la luz que los cubre,
como algunos presos del
apaleamiento.

Andamos por pañuelos
donde urdimos la farsa
del telar extensivo,
del verbo irrelevante y chabacano.

Somos una armadura
de huesos y delirios desmontables.

Matando el ruido blanco en cada
rostro.

Poniéndonos morados de alabanzas.

viernes, 26 de abril de 2013

DIÁLOGO AL ÓLEO




Acostúmbrate a enjuagar esta
tristeza, mosca nómada que ataca por las noches,
en el tóxico caldo de lo absurdo.

Mira el fondo asombrándote, averigua
qué se obtiene de sopa de mentiras
con larvas de pasiones y adjetivos.

Desdibuja el presente con tus labios,
llámalo telaraña o crucigrama,
tira el resto en el saco del olvido.

Atrévete a contármelo en susurros,
de mí nunca podré decir lo opuesto.

lunes, 22 de abril de 2013



ATRACO AL RETRATO DE UN POETA (2013-1572)

Tus palabras donde pueda verlas,
fechas y pliegos en el gris bramante
del paréntesis.
Boca cerrada, rostro desnatado,
huella donde embarcaste aquel carbón
de tus entrañas.
Tomar declaración a quien repite
lo que aguantan las teclas y los dedos,
como quien desayuna cantos de esperanza,
pensando en la receta de la inercia, como
si los minutos ni siquiera hiriesen.

jueves, 18 de abril de 2013

EL ROSTRO DE LA CODICIA


EL ROSTRO DE LA CODICIA

Nunca pensó que fuera a ser tan especial.

Él, que solamente en ocasiones
provocó la fiesta del agua y el jabón,
que alternaba con los pozos
donde las almas sucias no hacen pie.

Rozó la cuerda y una pierna esbelta
que salió a subasta en un hotel de carretera.

Se lo arrancaron de las manos
a un camarero y aburrido,
que sintió escalofríos.

La edad iba arrugando su semblante,
decolorándole  la cima del Olimpo,
donde habitan las banderas,
los guarismos y los templos.

Sus hermanos se divierten en Bruselas.

Compartió cartel con las colillas
que hacían cola en ceniceros llenos,
cuando los tipos duros
hablaban de negocios.

Un día le presentaron
a un cabeza de familia,
que compró a Nancy y a Lucas
y los sacó del paraíso
para llevarlos a las manos de su hija.

Y, desde entonces,
aquel billete de cincuenta,
tan solo ruega,
ahora que ya le pesan las arrugas,
que no comience desde cero su andadura.

EL SENDERO



El primer poema que escribí, exceptuando unos pocos de la infancia:

EL SENDERO

Anhelos y quimeras
existen, solo en el aire efímero
que inhalamos, esperas
interrumpir inviernos
acaso, surcando con tu velero

luminoso, lejano
con un valor primitivo, adviertes
el brillo ya gastado,
el duende que pendiente 
de un alambre de espinas va agotado.

Por una senda diáfana,
riscos infames, el señuelo del
tiempo serio, la rama,
la esencia que en aquel
queda opaca, te parecen no ser

más que sombras lejanas;
pero entonces te aferras al presente
de la noche turbada;
palabras de tu frente
te hacen saber impar y diferente.